CONMEMORANDO EL DÍA DE LAS VICTIMAS DEL CONFLICTO
ARMADO
9 DE ABRIL
PROHIBIDO
OLVIDAR, RECONCILIACIÓN PARA SANAR Y REPARACIÓN PARA CONSTRUIR LA PAZ
RED DEPARTAMENTAL
DE MUJERES VÍCTIMAS DEL CONFLICTO ARMADO
LAS AURORAS
CORPORACIÓN
COMPROMISO
El
9 de abril es el día nacional de la memoria y solidaridad con las víctimas del
conflicto armado interno en Colombia, hace parte del conjunto de medidas de
satisfacción que tienden a dignificar a las víctimas y a mitigar su dolor, por
lo cual en este día se rinden homenajes, se hacen manifestaciones públicas,
reflexiones, el Congreso de la República
se reúne en pleno para escuchar a las víctimas y sobre todo el Estado tiene el
deber de promover su realización y garantizar las condiciones en las que se hagan
estos actos, que también hacen parte de la reparación simbólica que nuestras
victimas necesitan.
La
conmemoración de este día es de vital importancia para los más de 7 millones de
víctimas y para la sociedad civil de Colombia, porque han sido décadas de
sufrimiento, de estigmatización, persecución y revictimización, por lo cual
esta fecha es tan importante en la memoria colectiva de los colombianos, en el
proceso de reparación integral de las víctimas y por supuesto en el proceso de
paz que se adelanta desde La Habana.
Este año toda Colombia va a estar conmemorando tan importante fecha, en
la cual todas las organizaciones, partidos políticos, sindicatos, gremios y
colectivos muestran su solidaridad con las víctimas, no solo en Colombia, sino
en el exterior, aun así a esta fecha la atraviesa el incumplimiento en la
aplicación de la normatividad de víctimas, el aumento de más víctimas, ya que
todavía está en pleno el conflicto, a pesar del avance de las negociaciones y
de promulgar el cese al fuego, sin desconocer la relación directa del proceso
de paz con las víctimas del conflicto armado en nuestro país, este 9 de abril
no se puede hablar solo de paz, sino que se debe recordar y reflexionar sobre la situación de las
víctimas, su reparación integral y la reconstrucción de sus vidas, porque al
hablar de paz, debemos ser conscientes que La justicia y la verdad son
aspectos fundamentales en un proceso de paz, por ello construir paz exige
proceso de reparación integral a las víctimas directas de este conflicto que
nos ha tenido más de 50 años en guerra.
Hacer memoria de los
eventos ocurridos en Colombia significa poner una postura del “Nunca Más”, así
mismo la invitación permanente a la sociedad está centrada en realizar un
proceso de sensibilización frente a lo ocurrido con nuestros hermanos(as)
colombianos(as) quienes se encontraron en medio de una guerra sin sentido que
lo único que ha hecho es destruir vidas y generar más pobreza en el país.
De igual manera se hace
necesario garantizar a la población victima sus derechos desde el esfuerzo
conjunto de las entidades responsables en aspectos como vivienda, educación,
salud y generación de ingresos, lo cual permite a las personas reconstruir su
vida bajo condiciones dignas.
A
casi cuatro años de la aparición de la ley de víctimas(Ley 1448 de 2011), los
resultados para esta población son muy pocos en cuanto a su reparación
integral, al respecto hay opiniones desde algunos sectores que acompañan las
víctimas[1] y con los cuales se está
de acuerdo en que hay aspectos positivos en la normatividad de víctimas, como:
la aparición de la ley 1448 de 2011 en la cual se reconoce que existen víctimas
del conflicto armado y enuncia los instrumentos de participación y reclamación
que las víctimas tienen para su reparación, el que las víctimas deben ser el
eje central de las negociaciones en La Habana, en cierta medida las mesas de
participación de víctimas permiten que estas tengan voz y voto, la
participación activa que hace que se conviertan en sujetos agentes de cambio. Normatividad que fue producto de las
incansables luchas de las víctimas y de sus defensores, pero que falta que se
materialicen sus preceptos en procura de la reparación integral a esta
población.
Pero
esto no significa que entonces haya en
la realidad una plena reparación integral, todavía las víctimas en Colombia
siguen siendo en su mayoría muy pobres, viven en asentamientos humanos en
condiciones indignas, no acceden a las fuentes de empleo o de ingresos, no
acceden a educación, pasan años sin
recibir las ayudas humanitarias como medidas de atención bajo la condición de
que si tienen más de 10 años de victimización, entonces no la requieren, las
condiciones de salud por efectos de la mala nutrición y desnutrición, del alto
costo de la atención en la salud, hacen que esta población vea con dificultad
que su reparación se realice y sobretodo que se logren avances significativos
debido a estas condiciones.
Las
organizaciones defensoras de Derechos Humanos acompañantes de la población víctima
y las organizaciones de víctimas hacemos un llamado a los Gobiernos: Nacional,
Dptales y Municipales para que asuman con vehemencia la implementación de la
ley y se cumplan los preceptos que rigen las disposiciones emanadas de la corte
constitucional frente a brindar las condiciones de vida digna a la población
victima a través de su reparación integral.
[1] Informe de la ley de víctimas.
Tres años de lenta implementación. Movimiento Nacional de Crímenes de
Estado. (MOVICE). Tres años de la ley
1448: un importante instrumento para la reparación, pero que se queda corta
para atender los derechos de las víctimas en el proceso de la
implementación, págs. 9-10.
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